Peter Drucker dijo: “La cultura se come como desayuno a la estrategia”. La cultura traduce cualquier estrategia en acciones y comportamientos que producen los resultados, por lo que es innegable su impacto en cualquier transformación empresarial.
Y es algo que, a pesar de que ocupa un papel clave en la evolución de las organizaciones hacia una entidad knowledge-driven, en ocasiones pasa desapercibido para las entidades, abrumadas por seguir el ritmo a las últimas técnicas de Inteligencia Artificial y probar sus posibilidades.
Mientras las organizaciones centran gran parte de su atención y esfuerzos en conocer estas técnicas, entender sus posibilidades y en ponerse manos a la obra, hay un gran habilitador que subyace a la adopción de Inteligencia Artificial que potencia la efectividad de todos estos esfuerzos. ¿Cómo aseguramos que los sistemas de IA que hemos implantado de forma acotada son utilizados de forma generalizada y adecuadamente? ¿Cómo vencemos esas barreras de costumbres y del “modo de hacer” tan arraigadas? La respuesta está en una gestión del cambio efectiva.
Pero antes de recurrir a la gestión del cambio como impulsor de la IA en la organización, debemos tener en cuenta los nuevos retos que plantea este contexto, como:
Por lo tanto, nos encontramos ante un gran reto en la gestión del cambio organizativo para favorecer la adopción de la IA: las organizaciones necesitan conseguir un cambio de mentalidad a nivel competencial, funcional y estratégico para que sus esfuerzos en torno a la implementación de IA no caigan en saco roto.
¿Qué necesitan para asegurar este cambio tan necesario?
Teniendo en cuenta estas particularidades de la gestión del cambio en torno a IA, tendremos la seguridad de diseñar y ejecutar una transformación cultural adecuada para impulsar la adopción de IA a través de sus máximos embajadores: las personas.
Un artículo de Leticia Gómez Rivero (Responsable de Estrategia y Gobierno de IA)
Durante los últimos meses se ha vivido una revolución más que evidente en el ámbito del procesamiento del lenguaje natural. Con asombro hemos visto cómo parece que una máquina es capaz de hablar con nosotros como si fuera un humano, logrando superar con creces el test de Turing.
Los procesos de negocio y de gestión TI se componen de dos elementos clave para su ejecución: la tecnología y las personas.
La inteligencia artificial está transformando el desarrollo de software a gran velocidad.
La IA ha demostrado ser un pilar fundamental para transformar industrias. Un ejemplo de ello es su aplicación en el ámbito de la asesoría financiera, donde la IA generativa está mejorando tanto la eficiencia operativa como la calidad de los servicios.